Me imagino que como yo cuando piensas en un lugar de comida asiática, te imaginas los típicos tonos rojo y negro para hacer alusión a su cultura. Pues déjame decirte que no todos son iguales, hoy conoce Gru grú: un restaurante de sushi que es otro rollo. La verdad es que este sitio me impresionó demasiado y por eso quiero compartirlo contigo en un ranking, ¡yasss!
1. El lugar está increíble
Al principio te dije que no es el típico lugar con las mamparas rojas colgando, ni el gatito que te saluda con la patita. Ahora te platico que sus instalaciones cuentan con un espacio cerrado y áreas abiertas para que puedas respirar el aire fresco. Ya sea de noche o de día te vas a deleitar con cada detalle, le pusieron mucho esmero a la decoración e iluminación, natural o artificial no tiene desperdicio. No vas a saber a dónde mirar, desde el piso hasta la vegetación le dan un aspecto único.
2. Comer ahí es toda una experiencia
¡Sushi con las manos! Esto es parte de su concepto, y es que no te proporcionan cubiertos ni palillos, pero puedes solicitarlos. Cuando somos peques descubrimos el mundo con las manos, y al crecer, perdemos de vista que nuestros sentidos también nos transmiten información. Observa, siente, huele y saborea el sushi, te aseguro que te va a encantar esta manera de comer. Es más, si aún no le agarras la onda a los palillos, este tema es cosa del pasado. Y ni te preocupes, nadie te mirará feo porque todos están en las mismas.
Por último, si tu mascota va contigo a todos lados, aquí es bien recibida.
3. Sus rollos no son convencionales
La carta es un distintivo importante, aquí sirven rollos inolvidables. Su sushi explora sabores, combinaciones de ingredientes y hasta emplatado que los hacen de todo menos ordinarios. No había visto rollos tan bonitos y que supieran tan bien. Te recomiendo el maki de camarón empanizado, es una delicia. Y si te gustan los frutales el especial de banana también está deli. Todo está elaborado al momento así que la frescura está asegurada.
Además pídete burritos, arroz o endamame y acompaña con bebidas sin o con alcohol, aquí hay chelitas y coctelería pa’ escoger.
4. Tienen responsabilidad social
Parte de su menú son platillos estacionales, pues buscan respetar el ciclo natural de los ingredientes y así utilizar productos orgánicos. Cuentan con un distintivo de Balance Gastronómico otorgado por la CANIRAC y los Servicios de Salud de Puebla, que reconoce aspectos como su menú con el desglose de contenido calórico de cada preparación de la chef.
Este es un negocio sustentable, lo cual se refleja en acciones como el uso de empaques ecológicos para el envío de pedidos o esos poquitos que pides para llevar. Incluso, si quieres colaborar con su filosofía, puedes traer tus propios recipientes.
5. Paquetes y costos
Sus precios varían, sin embargo son justos, sobre todo tomando en cuenta que consumen local. Además, su menú está increíble porque incluye especificaciones como las calorías y posibilidades de convertir a gluten free o vegano si así lo deseas. Así que definitivamente puedes explorar el costo-beneficio desde el momento de ordenar.
También puedes pedir por paquetes, que es una opción muy chida si vas en compañía, o simplemente quieres probar varias cosas. Por cierto, estos pueden incluir más que sushi, pues también tienen sopas y ensaladas.
Si quieres consultar la carta completa -que además acaban de renovar- da clic aquí.
