Ya sólo falta un día y probablemente no tienes el obsequio ideal. Tristemente ya se nos pasó la etapa en la que nos verían con ternura si bailamos el ratón vaquero o recitamos un poema. Tampoco mamá nos va a agradecer con una gran sonrisa si le damos una manualidad hecha con sopa. Y ya por último, ya no estamos en la edad de regalarle sartenes, o una plancha, o una licuadora… Que ya tiene, y que le “renuevas cada año”. Deja de darle trabajo y mejor consiéntela con los mejores regalos para el día de las madres. Aquí, en El Ranking.
1. Una experiencia
A veces nos centramos en las cosas materiales y nos olvidamos de que la vida es para vivirla, que puede sonar muy cliché pero no deja de ser verdad. Una experiencia puede hacer referencia a muchas cosas: una cata de vinos, una visita a un museo, un viaje en globo aerostático. Tampoco hace falta gastarse la quincena entera, a veces sólo se trata de creatividad y de saber ¿qué le gusta a mi mamá? Quizá le encantaría salir a comprar un helado y caminar por la calle. O que vayan a visitar a esa parte de la familia que extraña y nunca quieres acompañarla. Dale algo que vaya a recordar.
2. Un rato para ella
Mamá siempre está ocupada. Aún sentada en el sofá viendo televisión o leyendo algo, en su cabeza siempre está ‘la carga mental’: ¿qué voy a hacer después de esto?, ¿dónde habré dejado tal cosa?, ¿y si mi amiga no me confirma?, ¿y si la mancha no sale? Se dedique a lo que se dedique, su mente va más rápido de lo que tú lees esto. Un obsequio genial sería un momento de desconexión… Un masaje, una tarde en un spa, una comida que no tenga que preparar. Hay tantas actividades en las que lo que agradecerá es regalarse esa atención que siempre da a los demás.
3. Un momento en tu compañía
El tiempo ya estaba y nos inventamos la prisa. A veces nuestras tareas diarias nos consumen y nos agobian de tal manera que creemos que ya no nos queda espacio para nada. Pero desde ya te digo, no es así. En este punto lo único indispensable es que dejes tu teléfono y la escuches. En ocasiones mamá te quiere platicar su día, que aprendió algo nuevo o el chismecito de la vecina, pero no estás, aunque te tenga al lado. Así que ponle atención, háblale también de ti, de lo que te apasiona, y de lo que no tanto. Verás que es gratificante no sólo para ella, sino también para ti.
Ir a comer juntos puede ser una opción espectacular. Revisa estas opciones: Celebra a mamá en estos restaurantes de Puebla.
4. Algo que añore o necesite
En muchas ocasiones las mamás priorizan lo que otros quieren por sobre lo que ellas desean. Si tiene diez pesos, primero pensará si con ellos puede comprar algo que haga falta en casa, o algún detalle para alguien más. Aún teniendo el dinero, es más fácil pensar en veinte cosas antes que en esos aretes que vio y le encantaron. O en los zapatos cómodos que le caerían muy bien. Piensa un momento, seguro hay algo o más de una cosa que realmente necesite para sí: no para la casa, no para hacer algo en ella, PARA SÍ. O quizá no sea nada indispensable, pero sí algo que añore.
5. Muestras de afecto
Puede que suene hasta lógico, pero quizá no somos tan expresivos como mamá quisiera. Dile que la amas, dale un abrazo, llénala de besos. Ten atenciones y actos de servicio hacia ella. Le encantará, son gratis, ¡y nunca se acaban!
Es muy fácil hacer feliz a alguien. Y más si ese alguien es una mamá, tu mamá. Fácil como estar dispuesto a observar y escuchar, no fácil como comprar cualquier chocolate del super que está en la entrada para este 10 de mayo. Los mejores regalos para el día de las madres son aquellos que se dan desde el corazón. Toma en cuenta los cinco puntos anteriores y piensa, ¿qué disfrutaría más?
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